Era la técnica más económica para cubrir una pared disimulando las imperfecciones de  las paredes. Era el acabado de referencia para ocultar los posibles defectos que hubiesen ocurrido durante la construcción. Si la pared no es recta, o tiene algún desnivel, el uso del gotelé puede hacer que pase desapercibido.

Sanear una pared que tiene gotelé puede ser una tarea larga  y que genera muchos desperdicios. Hay muchas formas de quitar el gotelé que varían dependiendo de varios factores, como el tipo de gotelé existente, el estado de la pared que recubre y el presupuesto disponible, entre otros.