Es una pasta que se aplica sobre las paredes y techos como elemento decorativo. El estuco reviste las paredes otorgándoles una textura lujosa, suave y brillante, ideal para embellecer paredes y techos. Su aplicación consigue un efecto similar al mármol con una textura aterciopelada que recuerda a las piedras naturales. Además, el estuco no sólo tiene resultados estéticos sino que también refuerza las paredes y las impermeabiliza impidiendo que se concentre moho y humedad. Se trata de un material muy versátil que favorece el moldeado y tallado de formas. Se puede aplicar sobre cemento, yeso o madera. Se le pueden añadir diferentes tintes y variar la intensidad del color en cada capa para lograr acabados degradados, lo que aumenta las posibilidades artísticas y decorativas de este material.